Biomagnetismo
El Biomagnetismo es un sistema terapéutico desarrollado en el 1988 por el Dr. Isaac Goiz Durán, nominado al Premio Nobel de Medicina.
La Terápia Biomagnética está indicada para un gran número de problemas y trastornos, de los que resaltamos los siguientes:
Infecciosos (virus, bacterias, hongos y parásitos), metabólicos, inflamatorios, degenerativos, autoinmunes, crónicos, idiopáticos, Etc.
También está especialmente indicada en los siguientes casos:
Migrañas, asma, gastritis, bronquitis, sinusitis, papiloma humano, colon irritable, enfermedad de Crohn, herpes zoster, dermatitis, úlceras, problemas digestivos, infecciones por parásitos, problemas respiratorios, vértigo de meniere, psoriasis, cistitis o infección bacteriana, candidiasis o infección por hongos, cálculos renales o piedras en el riñón, infecciones en general, Etc.
Podría decirse por tanto, que el Biomagnetismo es unos de los sistemas más seguros y efectivos que existen para la eliminación de todo tipo de virus y bacterias, dado que no tiene efectos nocivos para la salud.
La Terapia Biomagnética, también denominada Par Biomagnético, es un método terapéutico que utiliza imanes de mediana potencia para combatir parásitos, bacterias, hongos, virus y otros gérmenes que son la causa de diversas enfermedades.
Está demostrado, que en un pH equilibrado las enfermedades no pueden desarrollarse.
La Terapia Biomagnética tiene como objetivo provocar un cambio en el pH del cuerpo, generando un ambiente inadecuado para estos microorganismos y provocando en consecuencia su eliminación.
Este tratamiento se efectúa con imanes pasivos (polaridad positiva y negativa), los cuales se aplican en diversas zonas del cuerpo humano como si se tratara de un rastreo o Escaneo Biomagnético.
Una vez reconocidas y confirmadas dichas zonas afectadas por su potencial energético, el terapeuta aplica un conjunto de imanes en esos puntos concretos durante 15-20 minutos, hasta que pueda confirmarse el equilibrio y la finalización del proceso.
El Biomagnetismo cambia el pH de tu cuerpo, de manera que los microorganismos que provocan la enfermedad desaparecen.